domingo, 13 de septiembre de 2015

Como criar rosas sanas y bellas

Para muchas personas, un jardín sin rosas no es un jardín. Pero, como es bien sabido, estas aromáticas y hermosas flores pueden resultar difíciles de cultivar y atraen muchas plagas. Aunque es verdad que requieren una atención especial, cuidar de las rosas no es tan complicado como parece. 

A continuación, te indicamos lo que debes y no debes hacer para disfrutar de un jardín lleno de rosas de té híbridas, en enredaderas, en miniatura o trepadoras.

Debes cavar profundo y aplicar abundante materia orgánica o harina de hueso a la tierra. Si haces un agujero de alrededor de 60 cm de profundidad y de anchura, tus rosas dispondrán de suficiente espacio para crecer. Si vas a plantar rosas a raíz desnuda, intenta formar un cono de tierra en el fondo del agujero para que las raíces puedan extenderse hacia la profundidad.
No debes poner las plantas demasiado juntas, demasiado cerca de un muro o debajo de un árbol, porque las rosas necesitan mucho espacio, aire y sol. Ten en cuenta que el sol de la mañana es mejor que el de la tarde, dado que seca rápidamente cualquier humedad, propicia para las enfermedades, en las hojas, y quema menos por su menor intensidad.
 
Debes dar a tus rosas tierra neutra o ligeramente ácida, rica en materia orgánica y con buen drenaje. Si la tierra es muy ácida, se puede tratar con cal bastante tiempo antes de la plantación; por otro lado, si es alcalina, se puede aplicar un abono específico para rosas.
No debes ponerlas en un lugar donde haya habido anteriormente rosas, puesto que es posible que la tierra haya dejado de ser apta para estas plantas y necesitarías sustituirla hasta una profundidad de 45 cm.
 
Debes protegerlas frente a enfermedades, especialmente si las rosas se infectaron de hongos durante el verano o la primavera pasados. Se recomienda una pulverización de efecto diferido con un buen producto que  matará la antracnosis o las esporas de moho que hayan sobrevivido al invierno. Las rosas pueden requerir la pulverización una vez cada quince días, así que mantente alerta para detectar signos de infección.
No debes dejar ninguna hoja de la estación anterior sobre los rosales o en la tierra que los rodea, dado que pueden albergar alguna enfermedad y diseminar esporas al resto de la planta. Destruye las hojas o deshazte de ellas, no las conviertas en abono orgánico.
 
Debes podar las rosas para fomentar que crezcan sanas y que la planta adopte la forma que quieras. Además, el hecho de retirar los tallos muertos, dañados o más débiles también permite que llegue más aire y luz solar al centro de la planta, lo que previene la aparición de enfermedades.
No debes podarlas demasiado pronto en climas fríos o templados, puesto que la rosa estará aletargada y, si después se produce una helada fuerte, podría morirse la parte que esté creciendo o incluso toda la planta. Es mejor podarlas de forma tardía, justo antes de que broten los capullos.
 
Debes regar tus rosas lenta y cuidadosamente. Es mejor regar dos veces a la semana de un modo concienzudo que regar cuatro veces a la semana de forma más superficial.
No debes regar tus rosas al anochecer, puesto que podría formarse moho. No riegues las rosas cuando haga mucho calor y sol, puesto que el agua se secará antes de que la planta pueda absorberla.
 
Debes abonar tus rosas en primavera y, después, una vez al mes, incluso si has aplicado compost alrededor del rosal. Para disfrutar de unas flores con bonitos colores, utiliza un fertilizante específico para rosas.
No debes abonar las rosas hasta que empiece el crecimiento propio de primavera, especialmente en las zonas frías, dado que la helada podría matar a la parte nueva que esté creciendo. Además, no utilices demasiado nitrógeno, puesto que un crecimiento rápido y abundante podría atraer pulgones.
 
Debes permanecer alerta para identificar síntomas de plagas comunes entre las rosas, como pulgones, piojos de plantas u orugas. Plantéate la posibilidad de plantar ajo mezclado con las rosas.

No debes esperar mucho tiempo para aplicar el tratamiento. Los pulgones absorben la savia de los nuevos brotes, capullos y hojas; además, se reproducen a gran velocidad, así que inspecciona tus rosas varias veces a la semana y trátalas en cuanto aparezca el primer síntoma de infección.

domingo, 23 de marzo de 2014

Diseño de Jardín - Elementos indispensables

Fuentes y elementos de agua

Uno de los mejores placeres que podemos disfrutar en un jardín es la sensación de aislarnos del mundo y si además incluimos un elemento tan sútil y delicioso como el sonido del agua… ¡es el paraíso!

Somos muchos los que pasamos el invierno soñando con las ansiadas vacaciones: descanso, relax, aire libre, naturaleza… sin darnos cuenta de que en nuestro jardín podemos recrear un espacio de ensueño en el que aprovechar esos momentos de pausa durante nuestra ajetreada vida habitual: una tarde libre o el fin de semana.

Con una pequeña fuente o surtidor en el jardín las sensaciones se disparan y es que el relajante sonido del agua es un Must si lo que pretendes es relajarte en tu jardín mientras te aíslas del mundanal ruido de la ciudad., y
Además de incrementar la belleza de un jardín son conocidos los beneficios asociados al sonido del agua, nada mejor que una pequeña fuente o un surtidor que invite al relax, y es que la relajación, suavizar la temperatura ambiente, incrementar la humedad del jardín, suavizar los sonidos externos, etc. son algunas de esas ventajas de instalar una fuente en el jardín ya conocidas desde hace siglos.

Terrazas o pequeños desniveles (si el terreno es muy plano pueden crearse artificialmente)
Una pendiente puede ser un escenario dramático para un jardín de rocas o siembra en terrazas y plataformas, o simplemente manteniendo el talud natural, todo ello puede combinarse con escaleras en el caso de que deba ser transitable.
Además un jardín con desniveles parece más grande y da más juego, aunque a la hora de ajardinarlos no vale cualquier cosa.
Antes de proyectar se debe estudiar el terreno en profundidad. Solo así podremos sacar el máximo partido de cada zona y crear un diseño armónico de conjunto.
La elección del tipo de técnica más adecuada (terrazas, taludes, o rocalla) dependerá en parte de la inclinación del terreno y de si la topografía es irregular o no. Un paisajista profesional puede ayudarte a determinar cual es la mejor solución para tu jardín.
Una pendiente de menos de 3% no requiere ninguna planificación especial, pero del 3% al 10% por ciento se necesita algo de control de la erosión, y para más del 10% son recomendables técnicas específicas de contención.
TDP014 - jardines en pendiente (5)
Macizos de flores y plantas sin flores
Por supuesto el principal elemento para diseñar un jardin son las plantas, pero lo importante del diseño es cuales utilizar y de que forma plantarlas, como agruparlas según su color, su mantenimiento, su necesidad de luz, su tamaño y otras características, como crear esos macizos de flores y hojas que brinden un impacto positivo al ambiente y a quien disfruta del jardín.
El paisajista Intenta encontrar el sello propio, el estilo, el aire diferente de tu jardín, aquello que va a definir el diseño. - El diseño recto y cuadriculado que enseña todo el jardín a la primera vista ofrece jardines aburridos, con la impresión de ser más pequeños, no apetece caminar por ellos, porque ya se sabe qué hay al final. Si acaso funciona para las entradas de oficinas, o empresas con una imagen sobria y muy ordenada.
Para un jardín particular es más apropiada la línea curva, aportando rincones secretos que no se verán hasta que no se recorra todo el camino. La línea curva aporta amplitud a áreas pequeñas.

Diseña un jardín cómodo para disfrutar de él y que no se acabe convirtiendo en una esclavitud. Especies que requieran un bajo mantenimiento, variedades tradicionales de la zona, que no requieran poda o tratamientos excesivos.
Para llevar a la práctica estos y otros detalles estamos nosotros, consúltanos.


sábado, 22 de marzo de 2014

PAISAJISMO

Paisajismo es la actividad destinada a modificar las características visibles, físicas y anímicas de un espacio, tanto rural como urbano, entre las que se incluyen: los elementos vivos, tales como flora y fauna, lo que habitualmente se denomina jardinería, el arte de cultivar plantas con el propósito de crear un bello entorno paisajístico; los elementos naturales como las formas del terreno, las elevaciones o los cauces de agua; los elementos humanos, como estructuras, edificios u otros objetos materiales creados por el hombre; los elementos abstractos, como las condiciones climáticas y luminosas; y los elementos culturales.
Paisaje deriva etimológicamente del francés pays (país), que refiere a una región, y del sufijo "aje" que le confiere acción al término. Paisajismo refiere a la acción de hacer País, al sentido de pertenencia, a la identidad de los habitantes conferido por el entorno del que provienen. Tal es la relevancia de este concepto que históricamente y aún en nuestros días, ser desterrado, deportado e incluso inmigrante es una condición de desarraigo que produce aflicción. A diferencia de la corriente del arte con el mismo nombre, el paisajismo moderno no solo recurre a lo visual sino a la multidimensionalidad del mismo: alto, ancho, profundidad y tiempo. .
El paisajismo es tanto arte como ciencia y requiere buenas dotes de observación y habilidades de diseño, así como planificación, creatividad, organización e imaginación. También puede definirse como un proceso racional por el cual el hombre utiliza la naturaleza como herramienta para expresarse, al mismo tiempo que obtiene diversos beneficios. Se trata de un concepto que engloba en pequeñas proporciones partes de múltiples disciplinas tales como agronomíaarquitecturasociologíaecología, arte, etc., para tratar los espacios teniendo en cuenta tanto el volumen de este como el factor tiempo; ya que se trabaja con seres vivos y estos tienen procesos.
El paisaje está tan arraigado en nosotros que forma parte de nuestra historia y de nuestra cultura. La necesidad de las personas de volcarse a ella es cada vez mayor, ya sea por controlar la contaminación, como efecto desestresante en contraste con las grises y aceleradas urbes, como recreación, o bien para tratar de conservar la belleza y la diversidad existentes. Ya no se trata solo de contemplar, sino también de experimentar y vivir en forma sana y equilibrada.

Breve reseña histórica

Si bien el origen del paisajismo tal y como lo conocemos hoy en día surge a partir de los conflictos ecológicos-sociales producto de la Revolución Industrial, la consciencia de la estrechez de la relación del hombre con la naturaleza existe desde siempre, uno de los registros escritos más antiguos es el Jardín del Edén en la Biblia donde se denota la afinidad del "verde" con la "inocencia", un ejemplo destacado ya que expone la necesidad psíquica del dominio del ser humano sobre la naturaleza, la que le provee de sustento y armonía, rodeado por murallas que lo protegen.

Luego de la Edad Media vendría el Renacimiento provocando una mayor expansión en el terreno de estos jardines y haciendo más hincapié en la búsqueda del deleite y el goce, pero siempre con límites marcados y accesible únicamente para la nobleza.
Tal fue el valor que adquirió el jardín, que poseerlo denotaba poderío, ejemplo máximo son los jardines de Versalles en Francia, gigantescas extensiones de tierra hasta donde alcanzara la vista, con chorros de agua desafiando la fuerza de gravedad y especies vegetales recortadas perfectamente con formas precisas y a una altura que diera a entender que no había nada por encima ni más allá que el poder del Rey. Todo noble que se dignara de serlo debía poseer un jardín con el estilo que Le Notre había diseñado para el Rey Luis XIV entre los años 1613 y 1700. Europa se vio invadida hasta el exceso de jardines geométricos con parterres, fuentes y esculturas, fue por política que los Ingleses reaccionaron planteando un estilo totalmente opuesto, un estilo que rescató las líneas orgánicas de la naturaleza, los lagos, las especies creciendo en todo su esplendor, pero aunque en apariencia era salvaje en la realidad era planificado.
Concepto totalmente opuesto fue el que adoptaron los orientales, distinta ubicación en el globo terráqueo, distinta cultura y forma de ver el mundo, por ende era diferente como asimilaron su contexto. Buscar un lugar armónico, con bella vegetación exuberante y planificar la vivienda a partir de ello, respetando las escenas que componía la naturaleza, imágenes que se calculaban serían vistas por el frente o una ventana, y finalmente la implementación de un espacio concedido a la meditación, esto fue el jardín Japonés.
Fue con la revolución francesa y el nuevo modelo de democracia, que aquellos jardines destinados a unos pocos fueron abiertos para el pueblo dando origen a los parques públicos.
La necesidad del hombre de abocarse hacia áreas más verdes y provistas de servicios que lo satisfagan es un hecho vigente, eventualmente se arribará a buen puerto, pero para ello es necesario que en nuestro hoy se elaboren análisis más profundos que conlleven observación y educación que trascienda por generaciones, ya que el proceso constructivo de las ciudades es largo, hereditario y multitudinario, no puede quedar relegado a solo un sector social. Comprender las necesidades de la naturaleza es comprendernos a nosotros mismos en múltiples aspectos, porque en definitiva aún con nuestro grado de evolución no dejamos de ser parte del conjunto que la conforma.

JARDINERIA

La jardinería es el arte y la práctica de cultivar los jardines. Consiste en cultivar, tanto en un espacio abierto como cerrado, flores (arriates), árboles, hortalizas, o verduras (huertas), ya sea por estética, por gusto o para la alimentación, y en cuya consecución el objetivo económico es algo secundario.
El término "jardín", conocido desde el siglo XII, parece provenir del compuesto latino-germánico hortus gardinus que significa, literalmente, "jardín rodeado de una valla", del latín hortus, jardín fráncico, o gart o gardo "cerrado", como si el jardín tuviera que defenderse contra los animales e incluso de los ladrones.

El término "jardinería" se conoce desde finales del siglo XIII (con él se designaba el conjunto de los jardines). Pero adquiere su rango de nobleza con el célebre tratado publicado por vez primera en 1709 titulado "Teoría y práctica de la jardinería", de Dézallier d’Argenville, abogado y secretario del rey, gran amante de los jardines. 
Hizo una síntesis de los conocimientos del Gran Siglo para el arte de los jardines y para las técnicas hortícolas. Por otra parte, Olivier de Serres, agrónomo, escribió en 1599 «El Teatro de la Agricultura y Cuidado de los Campos» detallando todo lo que se necesita para cuidar, enriquecer y embellecer la casa rústica. Se trata, indudablemente, de un manual agrícola en el que se explica la manera de gestionar una propiedad rural (la propiedad de O. de Serres era de 150 ha.) y en el que la finalidad económica primaba sobre el hecho estético y el placer, pero la obra contiene un capítulo titulado «La Jardinería», con unos subtítulos: «Para tener Hierbas y Frutos: las Hierbas y flores olorosas: las Hierbas medicinales: los Frutos de los Árboles: el Azafrán, el Lino, el Cáñamo, la Granza, los Cardos, los Rozeaux y, además: la Manera de hacer las Conservas para la conservación de los frutos en general».
El término jardinería se usa, especialmente, para el uso, goce y consumición de los particulares mientras que el término horticultura designa la actividad profesional dedicada a la producción de frutos, flores, legumbres y otros productos vegetales. Sus principales denominaciones son: la horticultura para las legumbres, arboricultura para los frutos, floricultura para las flores y el vivero para los árboles y arbustos. Pese a todo, puede ser utilizado para actividades de tipo lucrativo, si la producción no es muy importante, por ejemplo, cuando un horticultor vende, directamente, en un mercado. Esta situación es corriente en países donde los mercados continúan abasteciéndose por medio de pequeños productores que podrían denominarse "jardineros".
La diferencia entre la jardinería y la horticultura es una diferencia de valores y de medios: la jardinería puede ser un entretenimiento o un medio para complementar los ingresos, mientras que la agricultura o la horticultura se inscriben en los grandes circuitos económicos, con grandes superficies, cantidades y prácticas bien diferentes. La jardinería requiere, casi siempre, la mano de obra y utiliza poco capital y medios mecánicos, son típicos algunos útiles: una pala, un rastrillo, una cesta, una regadera, una carretilla. En comparación, la agricultura se sirve de tractores, segadoras, fertilizantes químicos, sistemas de irrigación, etc.

Johann Sperl: Muchachas en el jardín del agricultor1885.
File:Johann Sperl Mädchen im Bauerngarten.jpg